No recuerdo ninguna Navidad familiar sin turrón de Jijona, o del duro, de Alicante, Aquellas que pasé en otros países ni las cuento como fiestas navideñas. Y es que en tierras españolas, el turrón es un sinónimo de Navidades. Es el dulce más típico, y no creo que nadie me lo rebata.
Ya sea en su variedad “dura”, de Alicante, o en la “suave”, turrón de Jijona, o de cualquier otro lugar, es una tradición muy española. Por eso es curioso que la hayamos heredado de los invasores árabes hace ya muchos siglos.
Duro, suave o árabe, el turrón es parte integral de nuestra cultura culinaria, y de nuestras tradiciones navideñas. No puede faltar en estas páginas, ni en la lista de compras para las pascuas.
Por eso he querido contar esta dulce historia, y recomendar algunos de los mejores turrones de España.
¿Qué es exactamente un turrón?
En cualquiera de sus presentaciones, un turrón es un dulce hecho de almendra tostada y miel. En algunos casos puede añadírsele azúcar, o clara de huevo. Especialmente, algunos turrones pueden llevar avellanas. Y eso sin hablar del turrón moderno.
En el caso del turrón duro, se mezclan los ingredientes en caliente y se forman las tortas. Para hacer las tortas de turrón blando, turrón de Jijona, se muelen todos los ingredientes, y se amasa hasta conseguir la consistencia deseada.
El duro, como ya sabes, suele cubrirse con una oblea.
En España se producen tradicionalmente dos tipos de turrón: primero está el Turrón Duro, conocido como Turrón de Alicante, y luego el Turrón Blando, o Turrón de Jijona, por el pueblo alicantino en el que se produce el 90% de todo el turrón español.
En este pequeño enclave del interior valenciano se produce buena parte del turrón español. Pero también son famosos y de buena calidad los también valencianos turrones de Biar y Cansinos, los extremeños de Castuera y Garrovillas de Alconétar, y los catalanes de Agramunt.
Y que no se nos olvide el Turrón de Yema, muy típico de Cataluña. Los confiteros comenzaron a hacerlo para aprovechar las yemas de los huevos, cuyas claras iban a la producción del turrón duro. Tiene un ligero sabor que recuerda al de la Crema Catalana.
Turrón de Jijona, de Alicante, de Arabia
Hay evidencia documental de que el turrón ya se consumía en la Península Arábiga hace unos mil años. Para los miembros de las caravanas que cruzan los desiertos de la zona, un alimento de larga duración y con muchas calorías, era y sigue siendo bienvenido.
Los árabes, muy dulceros ellos, lo extendieron al norte de África, y de ahí el turrón cruzó a lo que es ahora España e Italia, otro país de tradición turronera.
Se cree que cuando Colón partió con sus naves hacia occidente, el turrón ya era un postre popular en Valencia. El turrón también se populariza en los virreinatos, principalmente en el del Perú, y en de la Nueva España, la actual México.
Un siglo después, ya lo es tanto, que Felipe II se ve obligado a frenar los altos gastos que se hacían en regalos de turrón en Alicante. Una famosa carta de su puño y letra lo evidencia.
Pero aunque se encuentra turrón en Arabia Saudita y otros países del Medio Oriente, suele ser producto español. Se ha convertido en una tradición más que nuestra y de otros países de habla hispana.
Los mejores turrones
Por supuesto que hay muchos tipos y marcas de turrones. Eso sí, para garantizar un buen producto, me fijo en donde fue hecho. Si procede de alguna de las localidades valencianas o extremeñas arriba mencionadas, me fío.
En Por Amor a la Gastronomía sólo recomendamos los mejores productos, y en turrones no hacemos la excepción. Ten por seguro que cualquiera de estas opciones te va a gustar. Son turrones españoles, y no es para menos.
De cualquier manera, elige una variedad, es la tradición, y lo sensato cuando tenemos invitados de gustos variados. Y acostumbro tener dos cajitas de cada tipo, y así quedo cubierto hasta el Día de Reyes.
El turrón moderno
En las últimas dos décadas ha surgido en España la moda del turrón que no es turrón. Esto es, barras de dulces, sobre todo de chocolate, a los que la gente llama “turrón”, pero están muy lejos de serlo.
Son muy populares, es verdad. Hay de muchos sabores y son muy suaves, por lo que aquellos que tienen problemas de dientes los favorecen. Me parecen una buena opción, pero que no se les llame turrón, porque no lo son.
Para Navidades, turrones españoles, de calidad y tradicionales.